
No obstante, la agenda comercial del Gobierno estaría paralizada. La prueba sería que a pesar de que la India, Turquía e Israel han manifestado su deseo de firmar acuerdos bilaterales con nuestro país, aún no han recibido una respuesta oficial del Perú. El Gobierno ha respondido a esta crítica diciendo que el Mincetur tiene a sus técnicos ocupados negociando el Acuerdo Transpacífico y el acuerdo de la Alianza del Pacífico, así como desarrollando tareas de administración de los TLC vigentes. Estas tareas son de gran importancia. Pero, si efectivamente se trata de un problema de escasez de recursos humanos, la solución debería ser muy simple: contratar y capacitar más negociadores. Este esfuerzo sería importante, en primer lugar, por la enorme cantidad de hogares peruanos cuyos ingresos dependen de las actividades vinculadas al comercio exterior. Y, además, porque la apertura del comercio internacional parece ser la única gran reforma económica en la que se ha profundizado a partir de la década del 2000, por lo que mal haría el Gobierno si no siguiera avanzando en ella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario