lunes, 14 de enero de 2013

Coma… solo cuando sea necesario


... signo de puntuación que suele indicarnos una pausa breve dentro de un enunciado... 
La coma, al igual que los demás signos de puntuación, está asociada al plano sonoro de nuestra lengua porque nos exige una elocución adecuada, pero también una correcta interpretación; así, una frase como: Luisa, cierra la puerta es distinta de Luisa cierra la puerta. En el primer caso estamos ante un enunciado que presenta un vocativo, es decir, ante el sustantivo “Luisa” que ha sido utilizado para llamar la atención del interlocutor, de ahí que esté separado del resto por una coma; mientras que en el segundo caso se trata de una enunciación; es decir, se está diciendo algo de Luisa (que “cierra la puerta”).
Si bien la coma nos indica una pausa breve, cabe señalar que no siempre su aparición  responde a la necesidad de realizarla, pues a veces hacemos una pausa natural en la lectura que no necesita de una marca gráfica. Así, ante un enunciado como: Los alumnos de la Facultad de Educación rindieron sus exámenes finales la semana pasada, solemos realizar una pausa después de “Educación” pero no va coma porque no se trata en absoluto de un vocativo ni de ninguna cláusula complementaria ni mucho menos explicativa.
Este tipo de pausa es la que origina uno de los errores más frecuentes en el plano escrito. En el siguiente ejemplo que ha sido recogido de un diario: Una granada de uso militar tipo piña, ha sido encontrada a inmediaciones de la cuadra 10 de la calle Arequipa frente a Osiptel, la coma que aparece es totalmente innecesaria porque está separando el sujeto (Una granada de uso militar tipo piña) del predicado (ha sido encontrada a inmediaciones de la cuadra 10 de la calle Arequipa frente a Osiptel).
Ante estos casos vacilantes, la normativa es bastante clara en señalar que es “incorrecto escribir coma entre el sujeto y el verbo de una oración, incluso cuando el sujeto está compuesto de varios elementos separados por comas” (Diccionario panhispánico de dudas, 2005), lo mismo que si se trata de un sujeto largo: “Cuando el sujeto es largo, suele hacerse oralmente una pausa antes del comienzo del predicado, pero esta pausa no debe marcarse gráficamente mediante coma” (DPD, 2005). Así, serían incorrectos: *Mi mamá, mi papá, mi abuela, mis tíos, me felicitaron por haber concluido satisfactoriamente mis estudios, y también: *Los alumnos que no hayan rendido el último control de lectura, tendrán cinco puntos menos en su examen final. El primer enunciado no debería llevar coma después de “tíos” aun tratándose de un sujeto compuesto por varios elementos (Mi mamá, mi papá, mi abuela, mis tíos); y el segundo tampoco aun si hacemos una pausa oral después del sujeto (Los alumnos que no hayan rendido el último control de lectura).
Excepciones a esta regla general serían “cuando el sujeto es una enumeración que se cierra con etcétera o su abreviatura” (DPD, 2005) como en Mi mamá, mi papá, mi abuela, mis tíos, etc., me felicitaron por haber concluido satisfactoriamente mis estudios; y, cuando “inmediatamente después del sujeto se abre un inciso o aparece cualquiera de los elementos que se aíslan por comas del resto del enunciado” (DPD, 2005) como en Los alumnos, como ustedes saben, están obligados a rendir todas las prácticas.
Por supuesto que este no es el único caso del uso de la coma, pero he creído conveniente tratarlo en este artículo porque se siguen cometiendo errores de este tipo, probablemente por desconocimiento; así que ya lo sabe estimado lector, utilice la coma solo cuando sea necesario, nunca entre sujeto y predicado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario