El peso se depreció, luego de que el jefe del Banco Central Europeo dijera que la política monetaria permanecerá expansiva por el tiempo que sea necesario.
La moneda cerró en 12.8917 a la compra y 12.8947 por dólar a la venta con una caída de 0.28% ó 3.67 centavos frente a los 12.8580 pesos del precio de referencia del miércoles. La divisa mexicana ha borrado por completo las ganancias acumuladas en el 2013 y registra una baja de 7.82% desde el 9 de mayo de 2013, cuando reportó su nivel más bajo a 11.9599 pesos por dólar. El miércoles, la moneda se depreció 0.64% para cerrar en 12.8580 pesos por dólar, su peor nivel desde el 31 de diciembre del 2012, cuando finalizó en 12.8704 unidades. Por otra parte, la Bolsa Mexicana de Valores se recupera y subía por la mañana, impulsada por los títulos de la gigante de las telecomunicaciones América Móvil y la embotelladora Coca-Cola Femsa (KOF). A las 14:20 hora local, el índice líder IPC se ubicaba en 40,433.03 puntos, con un leve avance de 0.53%, después de acumular un descenso de 3.3% en las últimas tres jornadas.El presidente del BCE, Mario Draghi, resaltó además, en una conferencia de prensa posterior a la decisión de la entidad de mantener las tasas en un mínimo histórico, que existen riesgos a la baja para el crecimiento del bloque monetario. Los comentarios de Draghi resultaban particularmente relevantes para México en la víspera del anuncio política monetaria del banco central local, que ha enfatizado en sus más recientes comunicados que está siguiendo muy de cerca la postura monetaria de las economías principales. En tanto, Estados Unidos dio a conocer que las nuevas solicitudes de subsidio por desempleo cayeron la semana pasada, apuntando a una leve mejora en las condiciones del mercado laboral, aunque sin el vigor suficiente para hacer que la Reserva Federal reduzca su estímulo monetario. "No se ha definido nada aún, evidentemente, pero se ha estado generando una especulación importante en los mercados (cuyo efecto se ha visto) magnificado por el tema de la liquidez del peso mexicano", comentó Rafael Camarena, economista del grupo financiero Santander.
Por lo pronto, los inversionistas optaban por seguir reduciendo su exposición a la moneda local a la espera de conocer el viernes el estado de las nóminas no agrícolas estadounidenses, en busca de alguna pista sobre el rumbo de la política monetaria en el principal socio de negocios de México.
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