La dirección del Grupo Santander señaló en una nota que la decisión “refuerza la marca Santander, que contará con una red de 4.000 sucursales bajo la misma identidad corporativa”.
“Esta operación se produce en el marco de una profunda reestructuración del sistema financiero español, que está suponiendo una fuerte reducción del número de competidores y la creación de entidades de mayor tamaño. En este contexto, Banco Santander ha decidido operar bajo una marca única en España, integrando Banesto y Banif”, explicó el grupo en su nota. El banco, que posee el 89,74% del capital de Banesto, propondrá a los accionistas minoritarios cambiar sus acciones por las de Santander. La paridad propuesta en el intercambio implica una prima del 24,9% respecto al cierre bursátil de Banesto del viernes (2,99 euros).
Tras la fusión, que “se completará en mayo del año que viene”, Santander tendrá 4.000 sucursales en España y su parte del mercado pasará del 10% de 2008 al 13% en 2015. “ Esta es una gran operación para todos”, declaró el presidente del Santander, Emilio Botín. “Para los accionistas de Santander y de Banesto que reciben una prima del 25% y acciones que tienen el dividendo más atractivo del mercado; para los clientes, que tendrán acceso a las más de 14.000 oficinas del banco en todo el mundo, y para los empleados, que podrán desarrollar una carrera profesional internacional”, precisó. “Santander es el banco más sólido y potente de la banca española”, proclamó Botín.
El grupo poseía el 100% del capital de Banif, su filial de banca privada, que gestiona “más de 36.000 millones de euros” de activos y tiene 550 trabajadores en 52 oficinas. La fusión se traducirá en una “disminución del número de empleados”, anuncia Santander sin dar cifras y afirmando que “se producirá de manera progresiva y sin medidas traumáticas”.
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