jueves, 29 de noviembre de 2012

Dilma le hizo reclamos a Cristina por las trabas al comercio bilateral

29/11/12
El paso de Dilma Rousseff por Buenos Aires, aun cuando fugaz, fue un gesto político que trascendió el mensaje a las cabezas empresariales, argentinas y brasileñas que se disputaban lugares en las proximidades de la jefa de Estado. Pero la presidenta brasileña, que desembarcó al mediodía en el sector militar de Aeroparque, para trasladarse en helicóptero a Los Cardales, no desaprovechó la oportunidad de señalar, ante su colega Cristina Kirchner, los desacuerdos que tiñen la relación bilateral y que, de tanto en tanto, generan irritación en Brasilia.
Las dos gobernantes tuvieron un encuentro previo, no sólo lejos de los ojos y oídos de la prensa sino también de sus propios colaboradores . Según dijeron a este diario fuentes del Palacio del Planalto, la cita “fue a solas, es decir, sin testigos”. Pero eso no fue obstáculo para que trascendieran algunos de los contenidos. Se sabe que una parte importante del diálogo giró alrededor de la crisis internacional , que según Dilma “ya impacta en nuestros países”, pero que en la visión de Cristina afecta casi exclusivamente a Europa, y en especial a España.
Otra parte de la reunión sirvió, sin embargo, para que Dilma puntualizara algunas diferencias con su “amiga, la presidenta de Argentina”, como ella misma definió. La jefa de Estado de Brasil, con su estilo imponente y su discurso “sólido”, a juzgar por los posteriores comentarios empresariales y por las duración de los aplausos que acompañaron varias de sus definiciones, puso en el foco de las conversaciones dos temas que le preocupan: las trabas a las importaciones que dificultaron la entrada de productos brasileños al mercado argentino y el “desvío de comercio” en detrimento de la producción brasileña y que beneficia a países de afuera de la región.
Para Dilma hay principios básicos: es preciso planificar la sociedad entre Argentina y Brasil y, luego, tener la voluntad política de ejecutarla. En otras palabras, la búsqueda de un“mayor equilibrio” en el intercambio entre ambos países no debe servir de excusa para “reducir en vez de expandir las relaciones mutuas” .
Según enfatizó Dilma “no es posible negar el impacto adverso de las restricciones administrativas sobre el intercambio bilateral, como lo reflejan los números de 2012”. La presidenta brasileña admitió que existe una realidad internacional desfavorable pero, sostuvo, eso “no puede llevar a una situación de desvío del comercio recíproco en beneficio de socios extra regionales y en detrimento de nuestras integración” .

No hay comentarios:

Publicar un comentario